Si su empresa tiene tendencia a descansar en la burocracia, o a reaccionar solamente cuando el mercado lo demanda, seguramente su ciclo vital será corto, y la causa de su muerte seguramente será la llamada destrucción creativa.
Las corporaciones que sobrepasan los 40 años de vida "son despiadadas cuando se trata de cambios. A las más exitosas no les tiembla la mano si deben canibalizar sus grandes generadores de ingresos para construir nuevos negocios."
El análisis del tema en Wall Street Journal explica la longevidad de las empresas y su éxito comercial, en la agresividad de sus altos directivos, que no dudan en tomar riesgos para expandir los negocios y anticiparse a los movimientos del mercado.
El mejor ejemplo de esto es Apple. "En los últimos años, Apple se ha convertido en un ejemplo de cómo evitar caer presa del dilema de la innovación. Después de regresar a la empresa a principios de los años 90, el ex presidente ejecutivo Steve Jobs le dio un nuevo brío a la línea de PC y colocó a la empresa en una posición dominante en la música digital con el lanzamiento del iPod."
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